Rebeldes de corbata: México y la invención del desarrollo

Las reglas de juego de la economía global son fijadas unilateralmente por un puñado de naciones poderosas—dice la sabiduría convencional. Pero Christy Thornton no está convencida y, a su juicio, esa idea refleja una visión histórica incompleta y, en últimas, sesgada pues se basa precisamente en las narrativas oficiales de las naciones hegemónicas. En este libro, publicado en 2021, esta profesora de sociología y estudios latinoamericanos en la Universidad Johns Hopkins propone que, para entender la hegemonía económica de los Estados Unidos en el siglo XX, es necesario estudiar la resistencia y las réplicas y contrapropuestas de las naciones subalternas.

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Portada del libro de Cathy Thornton, publicado por UCLA en 2021

El libro documenta las iniciativas diplomáticas del gobierno mexicano, a lo largo del siglo XX, para modificar las instituciones que regulaban el crédito, la inversión y el comercio internacionales en busca de dos objetivos: ampliar la representación de los gobiernos del “Sur Global” en los organismos decisorios internacionales y lograr una redistribución del surplus de capital del “Norte Global” mediante la financiación del desarrollo y la creación de condiciones comerciales y crediticias que tuvieran en cuenta los enormes desbalances entre las naciones industrializadas, por un lado, y América Latina y las naciones recién independizadas de África y Asia, por otro. Los episodios de esta historia incluyen:

  • La V Conferencia Interamericana de 1923, en Santiago, en la que México consiguió que se reformara la Unión Panamericana—la organización antecesora de la OEA creada en 1890—cuyas reglas excluían de la junta directiva y, por consiguiente, de la toma de decisiones a los gobiernos que no fueran reconocidos por Washington.
  • La VII Conferencia Interamericana de 1933, en Montevideo, en la que Estados Unidos renunció a la intervención militar como último recurso para forzar el pago de la deuda externa de los países latinoamericanos y en la que México propuso una “nueva concepción filosófica y legal del crédito” fundada en el principio constitucional de la “función social de la propiedad”.
  • Los esfuerzos fallidos de México, entre otros países latinoamericanos, y de la administración Roosevelt para crear un banco interamericano de desarrollo en la década de 1940.
  • La Conferencia de Bretton Woods (1944), donde la delegación mexicana logró aumentar la representación de los países latinoamericanos en el comité ejecutivo del naciente Fondo Monetario e insistió en incluir el desarrollo—y no solo la reconstrucción—entre los objetivos del Banco Mundial, creado en esa conferencia, venciendo la reticencia del delegado británico John M Keynes.
  • La Conferencia Interamericana sobre Problemas de la Guerra y de la Paz (Chapultepec, 1945), en la que México y otros países latinoamericanos contuvieron con éxito la pretensión del gobierno estadounidense de liberalizar el comercio en todo el continente e insistieron en su demanda de políticas e inversiones para el desarrollo.
  • La Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Empleo (La Habana, 1947) en la que delegaciones de Estados Unidos, Europa, México, Colombia, entre muchas otras, acordaron crear la Organización Internacional de Comercio, precursora de la OMC. Los países menos industrializados lograron incluir provisiones que les permitían proteger sectores económicos estratégicos, lo que provocó la oposición de los grupos económicos de Estados Unidos que frenaron su aprobación en el Congreso de ese país, por lo que la nueva Organización se quedó en el papel.
  • La Asamblea General de la ONU en 1974, que aprobó la Carta de Derechos y Deberes Económicos de los Estados, la cual reafirmaba la soberanía económica de las naciones y su derecho a establecer sus instituciones económicas sin interferencia de otros países. Aunque la Carta fue aprobada por la Asamblea, no contó con el voto favorable de Estados Unidos, Reino Unido, Dinamarca, Alemania Occidental, Bélgica ni Luxemburgo, lo que le restó fuerza a su implementación en la arena internacional.
El Hotel Mount Washington fue la sede de la Conferencia de Bretton Woods, en 1944
El Hotel Mount Washington fue la sede de la conferencia de Bretton Woods | Photo by Pavel Brodsky on Unsplash

Thornton describir el contexto político, ideológico y económico de cada uno de estos episodios a la vez que imprime a la narración un ritmo novelesco, casi cinematográfico. Así, por ejemplo, revela los cálculos y maniobras del secretario de estado, Henry Kissinger, para lograr que Estados Unidos votara favorablemente la Carta de Derechos y Deberes—y la oposición de otros miembros del gobierno de ese país que, en últimas, llevaron a un voto negativo.

El libro no deja duda sobre la audacia de la diplomacia mexicana, pero otras naciones latinoamericanas quedan relegadas a papeles secundarios, lo que en cierta forma debilita el argumento general del libro pues, antes que representativo, el caso de México parece ser atípico. Con todo, Thornton demuestra que, lejos de ser una imposición imperialista, la creación de organismos y programas de desarrollo fue, en buena medida, el resultado de las presiones de los gobiernos de América Latina, ávidos de conseguir las condiciones institucionales y el acceso a capital y tecnología necesarios para industrializar sus economías, ampliar sus mercados internos y competir en los mercados internacionales con productos diferentes a materias primas.

Referencias

Thornton, C. (2021). Revolution in Development: Mexico and the Governance of the Global Economy. University of California Press.

Más información
Vea a Christy Thornton presentando su libro en noviembre de 2021 (en inglés)